viernes, 22 de junio de 2012

La buena educación

Ya se que llevo tiempo sin escribir pero un desvelo a las 5 am me ha inspirado.
La buena educación, además del título de una película de Almodovar, es algo raro, difícil de encontrar y que escasea.
Por exigencias del guión me acabo de cambiar a una nueva casa con su correspondiente comunidad de vecinos.
Yo al principio pensaba que eran todos muy pijos y muy educados, grabe error. Apariencia tienen si, pero educados depende de lo que se entienda por educados. Si nos limitamos al sentido limitado de la expresión tienen un pase, pero si ampliamos a lo que es educación de verdad... desde luego la desconocen.
¿Qué quiero decir con el sentido limitado de la expresión? Muy sencillo, está claro que no escupen en el suelo, por ejemplo o que no sacuden los manteles por la ventana. Pero si buscamos más, para mi la buena educación siempre ha sido sacrificar tu propio bienestar para facilitar la convivencia y eso, señores, eso si cuesta trabajo. Lo otro son solo buenos modales.
Os voy a poner un ejemplo, de hecho el ejemplo que me quita el sueño.
Buena educación es plantarse si estar borracho en el jardín de tu casa con la música a tope a las 5.30 de la mañana y haciendo volteretas en la hierba quizá moleste a tus vecinos, algunos de los cuales tienen hijos pequeños. ( Por cierto mis vecinos no son estudiantes, son señores que si no tienen 50 años, desde luego los aparentan)
Buena educación sería haber parado los ruidos antes de esta hora, aunque te apetezca mucho mucho hacerlo, porque molesta o en segundo lugar, avisar antes para que la gente pueda pensar si se quieren quedar en casa y armarse de paciencia o irse a dormir a otro sitio.
Como ya he dicho es algo más complejo y desde luego  mucho más sacrificado que mantener los mínimos. Es no aparcar en una plaza de minusválidos si no lo eres, es que si tu hijo molesta a un adulto en un restaurante, piscina etc no desentenderse con eso de "todos hemos sido niños" si no aprovechar para inculcar las bases del principio del "no molestar". Y desde luego si te llaman la atención por cualquiera de las dos cosas, aceptarlo.
Aun a riesgo de parecer mi abuela tengo que decirlo, no hay que confundir el dinero con la educación. Básico pero por lo visto dificil de hacer.